martes, 30 de marzo de 2021

“El nido de rojos” del que salieron los mejores directores: el milagro de la escuela franquista de cine

 

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"El cine del franquismo se convirtió, sin que el propio Franco se percatara, en el principal azote de la dictadura. Autores como Juan Antonio Bardem, Luis García Berlanga, Basilio Martín Patino o Carlos Saura, se jugaron su vida realizando críticas feroces a la sociedad española marcada por la represión."


Saura, Berlanga, Bardem, Cecilia Bartolomé... todos ellos estudiaron allí. Una investigación recupera sus indómitas prácticas.

“El nido de rojos” del que salieron los mejores directores: el milagro de la escuela franquista de cine

El cine del franquismo se convirtió, sin que el propio Franco se percatara, en el principal azote de la dictadura. Autores como Juan Antonio Bardem, Luis García Berlanga, Basilio Martín Patino o Carlos Saura, se jugaron su vida realizando críticas feroces a la sociedad española marcada por la represión. Todas jugaron de forma inteligente y fueron hasta permitidas por la censura, pero todas ellas eran declaraciones claras de intenciones. Todos esos nombres no sólo tenían en común su profesión, sino que se habían formado en la misma escuela de cine, el Instituto de Investigaciones y Experiencias Cinematográficas (IIEC), que posteriormente se pasaría a llamar la Escuela Oficial de Cinematografía (EOC)

Es curioso que la dictadura, que consideraba este centro un “nido de rojos”, permitiera durante décadas que tantos y tantos directores se formaran en este oasis de libertad en un país donde esa libertad era una utopía. Casi todos los cineastas españoles de la segunda mitad del siglo pasado pasaron por allí: Berlanga, Imanol Uribe, Bardem, Carlos Saura, Basilio Martín Patino, Miguel Picazo, José Luis Borau, Manuel Summers, Jesús Franco, Julio Diamante, Mario Camus, Joaquím Jordá, Francisco Regueiro, Pedro Olea, Jaime Chávarri, Iván Zulueta, Manuel Gutiérrez Aragón, Víctor Erice y también ellas. Las pioneras: Pilar Miró, Cecilia Bartolomé y Josefina Molina (...)  

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