Sant Córd Manu IsiColectivo (ExS) ✊ Información alternativa
(...) Para defender su posición y acallar las advertencias contra la homofobia algunos se aferran a interpretaciones de las leyes, con voluntad de excluir del debate público a todas aquellas personas que no sean juristas. Por esa regla de tres solo una élite perteneciente al mundo del derecho podría pronunciarse sobre algunos de los problemas sociales más graves de nuestra sociedad, cuando lo cierto es que demasiado a menudo vemos más formación en derechos humanos en la sociedad civil que en el mundo de la judicatura. El papel actual del Poder Judicial es buena prueba de ello.
A lo largo de la historia la sociedad ha marcado muchas veces
el camino al poder legislativo, señalando los problemas colectivos
y reclamando soluciones en forma de nuevas leyes. Hace años el
divorcio, el aborto o el matrimonio homosexual estaban prohibidos
y los inmovilistas abrazaban el argumento de la ley para que nada
cambiara. En algunos lugares del mundo el asesinato de mujeres
a manos de sus maridos está legitimado si se demuestra que ellas
han sido adúlteras. En otros muchos la homofobia no está contemplada
como agravante ante un crimen. En todos ellos hay señoras y señores
muy solemnes que defienden esas posiciones "porque lo dice la ley".
No les da vergüenza, porque cuentan con un periodismo que les coloca
micrófonos dotándoles de prestigio.
Antes de que la ley determinara que ciertos crímenes eran machistas,
estos ya eran machistas. Algo no empieza a ocurrir solo porque la ley
lo determine. Otra cosa es cómo se ajusta el legislador a los tiempos.
Pero no porque lo diga la ley aparecen de repente los delitos de odio.
Si Carlos Bardem fuera un periodista es probable que algunos de
sus compañeros ya hubieran afeado sus palabras, tildándole de
activista. En algunos círculos del oficio periodístico el blanqueamiento
de la banalidad del mal es consentido, normalizado. Por el contrario,
la defensa de los derechos humanos es señalada como posicionamiento,
en el sentido peyorativo del término. El periodismo necesita muchos
más profesionales formados en derechos humanos y dotados de la
suficiente valentía para sacar las vergüenzas a quienes miran el mundo
desde la impunidad y las alturas. Periodistas que aprueben en antifascismo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario