Gloria VS 16/3/22
TRAS JULIA. 
Reivindicar el derecho a la igualdad nunca fue un proceso fácil. Su lucha se remonta desde hace siglos, su obtención era un recurso difícil, plagado de obstáculos y problemas.La educación y la formación de antaño estaba diseñada exclusivamente para el sexo masculino. Pocas féminas eran las que se atrevían a estudiar más allá de las limitaciones impuestas.Trascurrido el tiempo, y aún en plena consecución feminista (siglo XXI), se levanta en el barrio madrileño de Malasaña una escultura que representa la fuerza y la trascendencia pasada de las mujeres que querían cursar estudios superiores en una España del siglo XlX, arcaica, obsoleta y abnegada a la evolución natural de la vida.En 2003, se inauguró la obra escultórica "Tras Julia" de Antonio Santín Benito (1978), representa a una joven llamada Julia, que a mediados del siglo XIX asistió a la Universidad Central de la calle San Bernardo, caracterizada de chico, ya que sólo se limitaba la matriculación universitaria a los hombres. El monumento está situado en un lateral del antiguo Palacio Bauer, en la actualidad Escuela Superior de Canto.Hay leyendas que dicen que se trata de un homenaje a Concepción Arenal, escritora y jurista, que en 1840 asistió a clases de derecho disfrazada de hombre; otras teorías apuntan hacia algo genérico, y engloba a todas las mujeres precursoras de estudios de mayor grado que les costó sufrimientos y grandes adversidades poder formarse y titularse al mismo nivel que los hombres.La práctica de la equidad no tendría que ser un ejercicio de valentía, si se tuviese en cuenta las capacidades igualitarias entre ambos sexos.Quizás algún día esculturas como "Tras Julia" queden en un recuerdo clausurado por el tiempo, ojalá ninguna mujer en el futuro tenga que pugnar por lo que le corresponde como persona.El pasado 8M esté monumento fue masivamente fotografiado, y su imagen con todo respeto fue decorada con lazos morados como símbolo de lucha feminista.
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