Con estos datos, España es el tercer país europeo que paga más por servicios de salud, solo por detrás de Portugal y Suiza: es un 3,1% del PIB –frente al 2,3% de la media de la OCDE– y creció en 2021 un 14,5% hasta los 36.805 millones de euros, según recoge el Observatorio del sector sanitario privado 2024 publicado