Un alcalde de Ciudadanos se burló de una edil de Izquierda Unida con discapacidad auditiva: "Pero si no oyes aquí en el pleno".
Es necesario que hagamos una reflexión colectiva en la que no quepa la violencia de ningún tipo y sepamos capaces de respetar al contrario, sea cual sea su signo político, raza, religión, orientación sexual o discapacidad.
Es necesario que hagamos una reflexión colectiva en la que no quepa la violencia de ningún tipo y sepamos capaces de respetar al contrario, sea cual sea su signo político, raza, religión, orientación sexual o discapacidad.
Anita Botwin 16/07/2016
Nosotros no oímos, ustedes no escuchan
Entiendo que deban investigarse delitos tan horribles como escribir
chistes –más acertados o no- en twitter, o que se proceda a juzgar de
terroristas a cantantes que nada tienen que ver con ello, aunque quizá
ustedes no entiendan la ironía y la libertad de expresión. Lo entiendo,
sé que no es fácil. Ya hemos pillado que enaltecemos por encima de
nuestras posibilidades y que además incluso tener twitter es un
barbaridad siendo pobres. Ya lo dijo Teo.
Pero hoy en “humillaciones de segunda”, que no son las
censurables ni objetivo de escarnio público, tenemos que trasladarnos a
un pueblo de Toledo donde su alcalde insultó a una de las ediles
aludiendo a su discapacidad. Es bastante reprobable y ruin que un
alcalde se ría de una edil de otro partido usando su discapacidad
auditiva como objeto de mofa. Por si no se han enterado, que imagino que
estos delitos los debe llevar otra Audiencia o jurisdicción, trataré de
ponerles en situación.
El alcalde de Malpica en Castilla La Mancha, de Ciudadanos, apareció en algunas portadas de algunos medios digitales como éste, debido a su don de palabra, burlándose como comento de una edil de Izquierda Unida con la siguiente perla: "Pero si no oyes aquí en el pleno".
Por cierto, los coros de risas propios de patio de colegio corresponden
a la teniente alcalde del Partido Popular, con la que gobierna en la
localidad.
Además de esta "burla", Juan Carlos Flores recriminó a la edil en forma
de amenaza el apoyo que otorgaba a los trabajadores discapacitados que,
a su juicio, “lo único que quieren es no trabajar”. Menuda joyita,
oigan, como para premio Nobel de la Paz.
Esperad, que
esto no acaba ahí. La perla que soltó el alcalde tuvo lugar mientras la
concejala de IU y la teniente de alcalde del PP intercambiaban palabras
sobre una denuncia interpuesta por la vulneración de derechos laborales
de mujeres y personas discapacitadas por parte de los gestores del
ayuntamiento.
Pero esto, amigos, no abre las portadas
de los grandes medios de comunicación orquestados por el Ibex 35.
Nosotros no oímos, pero ustedes no escuchan. Ellos nos hablan día y
noche de Venezuela –cuando hay elecciones- o de la misa del gallo o del
calor que hace en verano y las vacaciones de los futbolistas. ¿A quién
le importa lo que puede sentir la edil insultada o los que nos sentimos
ofendidos por estos ataques? Al Ibex 35 y sus secuaces no, son ellos los
que controlan los medios de comunicación de masas y a sus títeres
políticos, entre otros a los de color naranja. Imagino que habrá
miembros de este partido con algún tipo de discapacidad o diversidad
funcional –o no-. De ser así, no creo que les haya hecho mucha gracia
esta “burla”, y estaría bien que tuvieran unas palabras con alguien
capaz de atacar a su adversario con tal bajeza moral.
Con unas humillaciones y enaltecimientos nos llevamos las manos a la
cabeza y con otras no. Hay humillaciones de primera y de segunda.
Humillaciones que abren grandes portadas, que se archivan y se vuelven a
abrir, porque debe haber mucho tiempo libre o mucha fijación que roza
la obsesión absurda y partidista. Luego están las humillaciones de
segunda que “no importan a nadie” porque debe ser que nadie de las
aquellas instancias se da por ofendido. ¿No es atentar también la
violencia verbal?, ¿la violencia a una persona con discapacidad riéndose
precisamente de eso? No estoy pidiendo aquí que se juzgue a este hombre
–aunque IU ya ha anunciado su denuncia más que respetable- , ni pido su
cabeza, ni su dimisión siquiera, pero dejen de hacer el ridículo
juzgando y humillando a algunos hasta la saciedad mientras hacen “oídos
sordos” en otros casos.
Es necesario que hagamos una
reflexión colectiva en la que no quepa la violencia de ningún tipo y
sepamos capaces de respetar al contrario, sea cual sea su signo
político, raza, religión, orientación sexual o discapacidad. Las
personas con discapacidad o diversidad funcional sufren discriminaciones
a patadas a lo largo de su vida, insultos y agresiones de todo tipo. Es
necesario y urgente ponerse en el lugar del otro, el respeto y la
empatía. Sé que pido mucho, pero por pedir que no quede.
No hay comentarios:
Publicar un comentario