El PP ha registrado este martes en el Parlamento de Andalucía dos proposiciones

de ley idénticas, una con Vox y otra con Ciudadanos –lo cual permitirá que se 

aprueben si no se disuelve antes la Cámara– para garantizar que los empresarios 

de la fresa y la frambuesa, que desde hace años presionan a la Junta de Andalucía, 

dispongan de manera legal de espacio y agua suficiente para sus cultivos: 

la extraerán del acuífero de Doñana a pesar de su sobreexplotación y a los riesgos 

de sequía. "No existe mejor forma de proteger la zona que legislando para facilitar 

el cumplimiento de la normativa y el acceso al agua de los profesionales", se lee 

en el texto presentado por los tres partidos.

La proposición, que modifica el llamado Plan de la Corona Forestal, no se ha 

trabajado con el Consejo de Participación de Doñana y cuenta con el rechazo 

de las organizaciones ecologistas, como WWF que ha acudido a la Unesco 

para frenar al presidente Juanma Moreno, porque la idea, afirman, supone 

la regularización de 1.460 hectáreas de regadío irregulares, "más del 85% 

de la superficie manifiestamente ilegal que amenaza Doñana", lo que 

"afectará gravemente al estado de conservación de este espacio Patrimonio 

de la Humanidad". La Confederación Hidrográfica del Guadalquivir 

también está en contra y considera que Vox, PP y Ciudadanos están 

actuando con "temeridad".

Los regantes del entorno de Doñana son un poder fáctico en una provincia en que 

la fresa y la frambuesa dan miles de empleos y mueven cientos de millones de 

euros y llevan años de presiones y de movilizaciones –de "asedio", según los 

ecologistas– para conseguir lo que hoy parece que pueden conseguir de la mano 

de PP, Ciudadanos y Vox (...)