Jack Henry Abbot ha compartido un enlace. eldiario.es
Trabajadores de uno de esos centros se enfrentan a penas de cárcel por grabar a menores atados a sus camas que suplicaban que se les liberase
Internos y trabajadores relatan el uso de estas prácticas, que algunos justifican como una medida extraordinaria pero necesaria
La mayoría de estos centros están gestionados por empresas privadas que reciben miles de euros al mes por cada interno
"Lo dejaron tres días atado a la cama, con inyecciones
por lo que él mismo me contó más tarde. Llegaba el olor al pasillo,
debía de hacerse ahí todo. El chaval daba pena, se oían los gemidos de
lamento…". Es el relato de Juan -nombre ficticio-, exinterno de un
centro terapéutico de menores en Castilla y León. Su experiencia
coincide con la que cuentan trabajadores e internos de otros centros de
menores en España, unas instituciones que en su mayoría están en manos
de empresas privadas.
Ese testimonio se recogió hace
un par de años durante una investigación periodística. Esto mismo
-menores atados a una cama con correas, pidiendo ayuda- es lo que se ve
en un vídeo publicado por eldiario.es en 2015, grabado por trabajadores del centro de reforma Tierras de Oria, en Almería. Ahora quienes lo grabaron se enfrentan a penas de entre 3 y 5 años de prisión. El centro Tierras de Oria, gestionado por la empresa GINSO, ha recibido múltiples denuncias en los últimos años. En este reportaje de El Confidencial varios trabajadores e internos denuncian los malos tratos que se producían en el centro.
"Hay contenciones que yo he visto y he escuchado porque
es a grito pelado, a chillido de que le están matando al menor, que
pueden durar de 1 a 4 horas”. Lo cuenta Cristian, exinterno del centro
terapéutico Picón del Jarama, en Madrid. Las contenciones pueden ser
físicas -una o varias personas sujetando al menor contra el suelo- o
mecánicas -atarles a una cama-.
Para Julio Rubio,
educador social y autor de varios libros sobre el tema, "los que estamos
denunciando estos malos tratos acabamos siendo denunciados". José
Antonio Bosch, abogado especializado en menores ahonda en la impunidad
de quienes realizan ese tipo de acciones: "Yo no he visto imputación
penal ninguna. No es que tenga sensación de que las quejas no se
escuchan, de lo que tengo sensación es que no hay vías siquiera para
poderse defender".
El hermetismo que rodea a estos
centros, justificado en la necesidad de salvaguardar la intimidad de los
menores, juega a veces en contra de ese mismo interés superior del
menor, que las instituciones están obligadas a proteger: "Usan esa
palabra, la protección del menor, para crear un hermetismo y que nadie
se entere de lo que está pasando", denuncia Rubio.
Este educador social relata algunos ejemplos de los métodos que utilizan
algunos de estos centros: "La empresa Salud Mental Consulting S.L
gestionaba un centro de Galapagar. Y hablando con los chavales te
contaban que los ponían contra la pared desnudos y los enchufaban con la
manguera en invierno, con agua fría, y que los ataban a las camas…" (...)
+ Graciela Caballero Irigoyen · diario16.com María José Pintor Sánchez-Ocaña -
+ Graciela Caballero Irigoyen · diario16.com María José Pintor Sánchez-Ocaña -
¿QUÉ SE SABE DE ESTAS DENUNCIAS SOBRE INDEFENSIÓN DE MENORES?
Tras los centros de acogida de menores se esconde la realidad más dura y sobrecogedora. Menores que han sido alejados de sus madres
y padres, progenitores a los que el mundo se les puso del revés, y que
tras sufrir crisis personales, económicas y conflictos llegaron a sufrir
trastornos psicológicos (...)
...........................................
OTRA COSA: El pensamiento mágico consiste en creer que las luchas de símbolos resuelven los conflictos reales de intereses, de Fernando Broncano
...........................................
OTRA COSA: El pensamiento mágico consiste en creer que las luchas de símbolos resuelven los conflictos reales de intereses, de Fernando Broncano
No hay comentarios:
Publicar un comentario