COPIADO de la pág. de fb de Mirta Emma de Arriba el 3/3/2017
EL JUEZ ANTI-MAFIA ITALIANO, GIOVANNI FALCONE, PUSO EN EVIDENCIA, HACE DOS DÈCADAS, LA DELICTIVIDAD DE MACRI.
SU ASESINATO EN 1992 EVITÒ LA PRISIÒN DEL HOY PRESIDENTE ARGENTINO, AUNQUE NUEVOS DELITOS ADELANTAN QUE SEGURAMENTE SU FUTURO SERÁ A RAYAS.
"Un hombre debe hacer aquello que su deber le dicta, cualesquiera que sean las consecuencias personales, cualesquiera que sean los obstáculos, el peligro o la presión. Ésta es la base de toda la moralidad humana", insistía casi con devociòn el Juez italiano anti-corrupciòn, Giovanni Falcone.
De acuerdo a ese pensamiento vivió, siendo consagrado como el Juez que màs hizo en la lucha contra la mafia.
Asì murió en el año 1992, después de un terrible atentado.
En el verano de 1984, el fiscal italiano anti-corrupcion , Giovanni Falcone, logró que “el capo de los dos mundos”, Tommaso Buscetta, hombre clave de Cosa Nostra en el tráfico de drogas entre Sicilia y Estados Unidos, fuera el primer gran arrepentido de la Mafia siciliana.
Buscetta diò nombres y hablò sobre las divisiones entre las familias, permitiendo la reconstrucciòn de crímenes no resueltos.
Fueron entrevistas de cuarenta y cinco días.
Antes de despedirse, el mafioso le advirtiò a Falcone:
-"No creo que el Estado italiano tenga intención de combatir a la Mafia. Le advierto que después de este interrogatorio, usted se convertirá en una celebridad. Pero buscarán destruirlo física y profesionalmente. No lo olvide: la cuenta que ha abierto con la Cosa Nostra no se cerrará nunca".
En el año 1992, doce años después de aquella histórica declaración y un sin nùmero de investigaciones y procesamientos, el juez Giovanni Falcone junto a su esposa, la también magistrada Francesca Morvillo, y sus escoltas, Rocco Di Cillo, Antonio Montinaro y Vito Schifani, fue brutalmente asesinado.
La explosión de 500 kilos de TNT, colocados bajo la carretera y hechos estallar al paso de la comitiva del juez, terminaron con la vida del creador del sistema del arrepentido e investigador fuera de fronteras de los lazos de la mafia italiana con otras mafias, de otras partes del mundo, entre ellas la Argentina.
Cincuenta y siete dias despuès serìa tambièn asesinado su amigo Borsellino, con quien compartiò Falcone la lucha contra la mafia.
ORIGEN
El primer caso de Falcone surgió en el año 1979, cuando decidió investigar a un constructor, Rosario Spatola, quien acababa de ganar un concurso público para la construcción de 422 apartamentos.
Rosario Spatola movìa gran cantidad de dinero, sin mácula aparente, màs allà de la apertura de un expediente administrativo por “aguar leche” en sus tiempos de distribuidor de ese producto.
Falcone descubriò a partir de esa investigación la gran facilidad del sospechado para hacerse con contratos públicos.
Siguiendo el destino del dinero de Spatola, el juez llegó a Cherry Hill, New Jersey (E;U) lugar donde residìan unos primos de Spatola desde 1964.
El juez Falcone descifrò el árbol genealógico de los Spatola y llegó a la conclusión de que el dinero que llegaba de América, era a cambio de la heroína que partìa desde Sicilia.
La mafia funcionaba de forma globalizada, como empresa multinacional, sin màs fronteras que las que le pudiera imponer la Justicia.
Spatola fue finalmente condenado a 13 años de prisión, pero en 1985 huyó a los Estados Unidos de América por su primo, el jefe de la Cosa Nostra estadounidense John Gambino.
Decìa Falcone:“Un cadáver se puede hacer desaparecer en ácido. Pero el dinero deja siempre una huella…”, poniéndose como objetivo el destino del dinero para ubicar el delito y los delincuentes.
De esa forma probò que las grandes cantidades de dinero con las que se hacían los edificios en Palermo provenían del tráfico de heroína entre Sicilia y Estados Unidos.
La droga llegaba desde los países productores del Triángulo de Oro.
Las refinerías estaban en Sicilia y en Francia, sobre todo en Marsella, partiendo desde alli hacia Estados Unidos como país de consumo.
Aquellas y otras investigaciones, en las que Falconne puso en el banco de los investigados a politicos, incluidos el Ministro Betino Craxi, propiciaron, a partir del 10 de febrero de 1986, el histórico juicio, “maxiproceso”, desarrollado en un bunquer y presidido por el juez Alfonso Giordano.
Durante dos años declararon cientos de mafiosos, imponiéndose mas de 28 cadenas perpetuas y miles de años de presidio a más de 300 mafiosos, salvándose sì Luciano Liggio, el más famoso criminal mafioso, por la incidencia del juez Alfonso Giordano..
El éxito de aquel histórico juicio, constituyò al centro mismo del poder político, mediático y judicial en los nuevos enemigos de Falconne y su juez amigo y colaborador, Pablo Borsellino.
A partir de ese juicio, Falcone y Borsellino fueron acusados por la prensa, parte de la justicia y el Estado de “arribistas”, soberbios creadores del “culto a la personalidad” y hasta corruptos.
Falcone, como lo habìa previsto el capo mafioso Tommaso Buscetta, terminò siendo un personaje demasiado vulnerable.
La Cosa Nostra, al advertir que el Estado no respaldaba las iniciativas de Falcone, pasò a tener vía libre para acabar con su vida.
A pesar de una serie de atentados, Falconne seguía indemne.
En el año 1991, el nuevo ministro de Justicia reivindicò la degradada figura de Falcone, proponièndole ocupar el cargo de director de Asuntos Penales en el ministerio de Justicia, lo que significaba disponer de plenos poderes desde Roma para coordinar la lucha contra el crimen organizado en todo el país.
Es a partir de ese momento que comienzan a sucederse los grandes logros en la lucha contra la Mafia, con el definitivo apoyo del Estado italiano, quien por primera vez en toda su historia se situó abiertamente contra la Antimafia.
Era el gran triunfo del gran juez, quien creò dos organismos fundamentales de la lucha contra el crimen organizado; la Dirección de Investigación Antimafia (DIA) y la Dirección Nacional Antimafia (DNA).
Era también el gran triunfo del Estado en la lucha contra la mafia italiana.
A partir de ese poder, el juez Falconne condenò al primer ministro italiano, Betino Craxi, quien huyò a Tunez donde muriò en el año 2000.
En el año 1992, la relaciòn del fugitivo Betino Craxi con la familia Macri era para Falcone un hecho.
Informaciòn surgida del centro de los grupos mafiosos, determinò el viaje de Falcone a Argentina para investigar la relación de la Mafia italiana con la familia Macri.
Sabìa el fuez Falcone que los Macri habían hecho fortuna al estilo de las mafias italianas, es decir a través de la obra pública y que eran dueños de Sevel, que incluìa la firma FIAT.
Tambièn sabìa que "la deuda de esa empresa,(FIAT), de 170 millones de pesos, terminó transformada en bonos del Estado, lo que le permitió a Macri pagar su deuda a un valor que en términos reales equivalió a menos de un 10 por ciento del original".
Luego de varios meses de investigación en Argentina, periodo en el que se entrevistò con jueces, el Presidente Menem, legisladores y el Ministro Caballo, Falcone declaró que “los Macri estafaban al Estado con los contratos de obras publicas y el blanqueo de deuda privada a deuda publica a través de FIAT”y que “ esa familia es en argentina un Estado paralelo”, lo que significaba reconocer que no obtendrìa ningùn tipo de informaciòn oficial-
Pocos meses después el mayor fiscal antimafia de la historia, fue asesinado y los Macri siguieron su camino sin obstáculos,
“Los Macr tienen una villa en Cerdeña, a nombre de un amigo que es como el hermano de Macri, donde sucede de todo, allí un día va la mafia italiana, otro día cardelanes, y otro Sofía Loren. Torello y Caputo son quienes llevan adelante los negocios.
Nicolás Caputo es la mano derecha de Mauricio, quien también ha conseguido los negocios mas importante de obra pública. Torello es el que maneja el negocio del juego y lleva adelante toda esta negociación”, reconocìa el juez Falcone al inicio de una investigación finalmente trunca por su asesinato.
Sin embargo el inicio de las investigaciones contra los Macri no procedieron del juez Falconne, sino que en el año 1983, a traves del tambien juez antimafia Carlo Palermo, quien ese mismo año solicitò la captura de los hermanos Macri.
Todo empezò con una carta hallada por el juez Palermo, remitida desde Buenos Aires por el representante de Craxi, que contaba que en febrero de 1982 “Macrì ofrreciò al gobierno argentino la total disponibilidad de las empresas italianas para colaborar con el aprovisionamiento para la guerra de las Malvinas, incluyendo helicópteros. A cambio de este apoyo político el gobierno argentino se comprometiò a dar a Macrì la concesión para ampliar y explotar por veinte años la red subterránea, llevándola al doble de su extensión”.
El autor de la carta que el juez Palermo encontró en un allanamiento era Gradenigo. que habia integrado la milicia fascista Guardia Republicana Nacional, en la que se destacó como torturador. Finalmente Carlo Palermo renunciò a su cargo, y fue el juez Falconne quien intentò probar algo que el daba por cierto; LOS MACRI SON LA EXPRESIÓN DE LA MAFIA ITALIANA EN ARGENTINA.
El mismo secuestro de Macri fue puesto en dudas por los jueces italianos investigantes, quienes afirman fue una alerta de la mafia itamiana para persuadir a Mauricio de un cambio en su vida, demasiado expuesta en una organizaciòn de protagonistas de bajo perfil.
A la fecha, cual respaldo para las investigaciones de los jueces Palermo y Falconne, nuevas pruebas sacuden los estrados del mundo, a partir de acciones delictivas de Macri con Ofshores, que adelantan su futuro a rayas.
Rolando Zanetta
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OTRO ASUNTO: Tzvetan Todorov, el elogio de la insumisión. Por Emma Rodríguez
SU ASESINATO EN 1992 EVITÒ LA PRISIÒN DEL HOY PRESIDENTE ARGENTINO, AUNQUE NUEVOS DELITOS ADELANTAN QUE SEGURAMENTE SU FUTURO SERÁ A RAYAS.
"Un hombre debe hacer aquello que su deber le dicta, cualesquiera que sean las consecuencias personales, cualesquiera que sean los obstáculos, el peligro o la presión. Ésta es la base de toda la moralidad humana", insistía casi con devociòn el Juez italiano anti-corrupciòn, Giovanni Falcone.
De acuerdo a ese pensamiento vivió, siendo consagrado como el Juez que màs hizo en la lucha contra la mafia.
Asì murió en el año 1992, después de un terrible atentado.
En el verano de 1984, el fiscal italiano anti-corrupcion , Giovanni Falcone, logró que “el capo de los dos mundos”, Tommaso Buscetta, hombre clave de Cosa Nostra en el tráfico de drogas entre Sicilia y Estados Unidos, fuera el primer gran arrepentido de la Mafia siciliana.
Buscetta diò nombres y hablò sobre las divisiones entre las familias, permitiendo la reconstrucciòn de crímenes no resueltos.
Fueron entrevistas de cuarenta y cinco días.
Antes de despedirse, el mafioso le advirtiò a Falcone:
-"No creo que el Estado italiano tenga intención de combatir a la Mafia. Le advierto que después de este interrogatorio, usted se convertirá en una celebridad. Pero buscarán destruirlo física y profesionalmente. No lo olvide: la cuenta que ha abierto con la Cosa Nostra no se cerrará nunca".
En el año 1992, doce años después de aquella histórica declaración y un sin nùmero de investigaciones y procesamientos, el juez Giovanni Falcone junto a su esposa, la también magistrada Francesca Morvillo, y sus escoltas, Rocco Di Cillo, Antonio Montinaro y Vito Schifani, fue brutalmente asesinado.
La explosión de 500 kilos de TNT, colocados bajo la carretera y hechos estallar al paso de la comitiva del juez, terminaron con la vida del creador del sistema del arrepentido e investigador fuera de fronteras de los lazos de la mafia italiana con otras mafias, de otras partes del mundo, entre ellas la Argentina.
Cincuenta y siete dias despuès serìa tambièn asesinado su amigo Borsellino, con quien compartiò Falcone la lucha contra la mafia.
ORIGEN
El primer caso de Falcone surgió en el año 1979, cuando decidió investigar a un constructor, Rosario Spatola, quien acababa de ganar un concurso público para la construcción de 422 apartamentos.
Rosario Spatola movìa gran cantidad de dinero, sin mácula aparente, màs allà de la apertura de un expediente administrativo por “aguar leche” en sus tiempos de distribuidor de ese producto.
Falcone descubriò a partir de esa investigación la gran facilidad del sospechado para hacerse con contratos públicos.
Siguiendo el destino del dinero de Spatola, el juez llegó a Cherry Hill, New Jersey (E;U) lugar donde residìan unos primos de Spatola desde 1964.
El juez Falcone descifrò el árbol genealógico de los Spatola y llegó a la conclusión de que el dinero que llegaba de América, era a cambio de la heroína que partìa desde Sicilia.
La mafia funcionaba de forma globalizada, como empresa multinacional, sin màs fronteras que las que le pudiera imponer la Justicia.
Spatola fue finalmente condenado a 13 años de prisión, pero en 1985 huyó a los Estados Unidos de América por su primo, el jefe de la Cosa Nostra estadounidense John Gambino.
Decìa Falcone:“Un cadáver se puede hacer desaparecer en ácido. Pero el dinero deja siempre una huella…”, poniéndose como objetivo el destino del dinero para ubicar el delito y los delincuentes.
De esa forma probò que las grandes cantidades de dinero con las que se hacían los edificios en Palermo provenían del tráfico de heroína entre Sicilia y Estados Unidos.
La droga llegaba desde los países productores del Triángulo de Oro.
Las refinerías estaban en Sicilia y en Francia, sobre todo en Marsella, partiendo desde alli hacia Estados Unidos como país de consumo.
Aquellas y otras investigaciones, en las que Falconne puso en el banco de los investigados a politicos, incluidos el Ministro Betino Craxi, propiciaron, a partir del 10 de febrero de 1986, el histórico juicio, “maxiproceso”, desarrollado en un bunquer y presidido por el juez Alfonso Giordano.
Durante dos años declararon cientos de mafiosos, imponiéndose mas de 28 cadenas perpetuas y miles de años de presidio a más de 300 mafiosos, salvándose sì Luciano Liggio, el más famoso criminal mafioso, por la incidencia del juez Alfonso Giordano..
El éxito de aquel histórico juicio, constituyò al centro mismo del poder político, mediático y judicial en los nuevos enemigos de Falconne y su juez amigo y colaborador, Pablo Borsellino.
A partir de ese juicio, Falcone y Borsellino fueron acusados por la prensa, parte de la justicia y el Estado de “arribistas”, soberbios creadores del “culto a la personalidad” y hasta corruptos.
Falcone, como lo habìa previsto el capo mafioso Tommaso Buscetta, terminò siendo un personaje demasiado vulnerable.
La Cosa Nostra, al advertir que el Estado no respaldaba las iniciativas de Falcone, pasò a tener vía libre para acabar con su vida.
A pesar de una serie de atentados, Falconne seguía indemne.
En el año 1991, el nuevo ministro de Justicia reivindicò la degradada figura de Falcone, proponièndole ocupar el cargo de director de Asuntos Penales en el ministerio de Justicia, lo que significaba disponer de plenos poderes desde Roma para coordinar la lucha contra el crimen organizado en todo el país.
Es a partir de ese momento que comienzan a sucederse los grandes logros en la lucha contra la Mafia, con el definitivo apoyo del Estado italiano, quien por primera vez en toda su historia se situó abiertamente contra la Antimafia.
Era el gran triunfo del gran juez, quien creò dos organismos fundamentales de la lucha contra el crimen organizado; la Dirección de Investigación Antimafia (DIA) y la Dirección Nacional Antimafia (DNA).
Era también el gran triunfo del Estado en la lucha contra la mafia italiana.
A partir de ese poder, el juez Falconne condenò al primer ministro italiano, Betino Craxi, quien huyò a Tunez donde muriò en el año 2000.
En el año 1992, la relaciòn del fugitivo Betino Craxi con la familia Macri era para Falcone un hecho.
Informaciòn surgida del centro de los grupos mafiosos, determinò el viaje de Falcone a Argentina para investigar la relación de la Mafia italiana con la familia Macri.
Sabìa el fuez Falcone que los Macri habían hecho fortuna al estilo de las mafias italianas, es decir a través de la obra pública y que eran dueños de Sevel, que incluìa la firma FIAT.
Tambièn sabìa que "la deuda de esa empresa,(FIAT), de 170 millones de pesos, terminó transformada en bonos del Estado, lo que le permitió a Macri pagar su deuda a un valor que en términos reales equivalió a menos de un 10 por ciento del original".
Luego de varios meses de investigación en Argentina, periodo en el que se entrevistò con jueces, el Presidente Menem, legisladores y el Ministro Caballo, Falcone declaró que “los Macri estafaban al Estado con los contratos de obras publicas y el blanqueo de deuda privada a deuda publica a través de FIAT”y que “ esa familia es en argentina un Estado paralelo”, lo que significaba reconocer que no obtendrìa ningùn tipo de informaciòn oficial-
Pocos meses después el mayor fiscal antimafia de la historia, fue asesinado y los Macri siguieron su camino sin obstáculos,
“Los Macr tienen una villa en Cerdeña, a nombre de un amigo que es como el hermano de Macri, donde sucede de todo, allí un día va la mafia italiana, otro día cardelanes, y otro Sofía Loren. Torello y Caputo son quienes llevan adelante los negocios.
Nicolás Caputo es la mano derecha de Mauricio, quien también ha conseguido los negocios mas importante de obra pública. Torello es el que maneja el negocio del juego y lleva adelante toda esta negociación”, reconocìa el juez Falcone al inicio de una investigación finalmente trunca por su asesinato.
Sin embargo el inicio de las investigaciones contra los Macri no procedieron del juez Falconne, sino que en el año 1983, a traves del tambien juez antimafia Carlo Palermo, quien ese mismo año solicitò la captura de los hermanos Macri.
Todo empezò con una carta hallada por el juez Palermo, remitida desde Buenos Aires por el representante de Craxi, que contaba que en febrero de 1982 “Macrì ofrreciò al gobierno argentino la total disponibilidad de las empresas italianas para colaborar con el aprovisionamiento para la guerra de las Malvinas, incluyendo helicópteros. A cambio de este apoyo político el gobierno argentino se comprometiò a dar a Macrì la concesión para ampliar y explotar por veinte años la red subterránea, llevándola al doble de su extensión”.
El autor de la carta que el juez Palermo encontró en un allanamiento era Gradenigo. que habia integrado la milicia fascista Guardia Republicana Nacional, en la que se destacó como torturador. Finalmente Carlo Palermo renunciò a su cargo, y fue el juez Falconne quien intentò probar algo que el daba por cierto; LOS MACRI SON LA EXPRESIÓN DE LA MAFIA ITALIANA EN ARGENTINA.
El mismo secuestro de Macri fue puesto en dudas por los jueces italianos investigantes, quienes afirman fue una alerta de la mafia itamiana para persuadir a Mauricio de un cambio en su vida, demasiado expuesta en una organizaciòn de protagonistas de bajo perfil.
A la fecha, cual respaldo para las investigaciones de los jueces Palermo y Falconne, nuevas pruebas sacuden los estrados del mundo, a partir de acciones delictivas de Macri con Ofshores, que adelantan su futuro a rayas.
Rolando Zanetta
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OTRO ASUNTO: Tzvetan Todorov, el elogio de la insumisión. Por Emma Rodríguez
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