Un informe del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos muestra que el 80% de los residentes trabaja más horas de las que permite la directiva europea y que el 13% no descansa después de una guardia.
La primera noche que Juan Pablo Carrasco estuvo de guardia atendió a un paciente oncológico, un infarto y un ictus. “Era un chaval de 26 años, a las tres de la mañana y me vi muy solo”, explica.
La imagen es habitual y durante aquel primer año de residencia, se repetía cinco o seis veces al mes. Según un estudio del Consejo General de Colegios Oficiales de Médicos, del que Carrasco es coautor, el 80% de estos profesionales en formación trabajan más del máximo de horas de jornada laboral establecida por la directiva europea o no descansan las que deberían. Una situación que se ve agravada por esa repetición de guardias, que llevan al límite del burnout a los médicos jóvenes.
Los médicos internos residentes (MIR) son aquellos profesionales que están realizando su especialidad dentro del Sistema Nacional de Salud. Es decir, es personal en formación, cuya labor debería estar supervisada por un adjunto, de forma más relajada a medida que van adquiriendo competencias durante los cuatro o cinco años que dura este periodo. Sin embargo, no siempre ocurre así, especialmente por las noches.
“Tenemos datos de que en los hospitales donde hay residentes, las plantillas asistenciales son menores, porque se entiende que su función aporta a la del centro”, explica la secretaria técnica de médicos jóvenes y MIR de la Confederación Estatal de Sindicatos Médicos (CESM), Sheila Justo. Desde las organizaciones sindicales mantienen lo contrario: “Tendrían que tener plantillas suficientemente dotadas o supradotadas para que los facultativos puedan hacer labores asistenciales y de docencia”.
El estudio publicado por la Organización Médico Colegial muestra que los residentes españoles, unos 30.000 según estimaciones, trabajan más horas de las que permite la directiva europea y la legislación laboral propia. Esta señala tres cuestiones que, a tenor de los datos recabados, no se cumplen en muchos casos: la jornada laboral máxima debe ser de 48 horas semanales de media cada semestre, el descanso diario entre jornadas tiene que ser de, al menos, 12 horas, y el semanal, de 36 (...)
No hay comentarios:
Publicar un comentario