Fernando Broncano R 1/11/21
Aunque ya lo hemos olvidado, la escatología no es solo el estudio de las expresiones sobre la mierda, fue también la parte de la teología que se ocupaba de las postrimerías y de los últimos días de la humanidad. El autor de este artículo recorre la moda de largotermismo, la filosofía del fin del tiempo y de la humanidad. Observa la creciente ola de pensamiento sobre el apocalipsis a derecha e izquierda y observa también que es, con mucho, la filosofía (ideología) más financiada desde el comienzo del neoliberalismo. Elon Musk (Tesla) financiando el Instituto para el futuro de la humanidad de Nick Bostrom, Peter Thiel, el billonario que financió a Trump, dedica ahora su dinero al Instituto para la investigación de la inteligencia de las máquinas, cuyo objetivo es salvar a la humanidad del apocalipsis de las máquinas. Y muchos más ejemplos.
Los filósofos posmodernos pidieron al mago que les librara de la metafísica de la presencia y el mago malvado les trajo la filosofía de la ausencia (de futuro).
Phil Torres, un filósofo que escribió un libro sobre lo apocalíptico, ahora se arrepiente y considera el largotermismo como una ideología que hay que diseccionar y tratar con cuidado: con ese cuidado que reservamos para los virus mortales.
El apocalipsis fue siempre la parte más rentable de las religiones y ahora lo es de las nuevas religiones del protecnologismo y el antitecnologismo (dos sectas de una misma iglesia).
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