“Quien no espera lo inesperado, no llegará a
encontrarlo” (Heráclito)
Decía Tinbergen que el ser humano es la única especie capaz
de asesinar en masa. El único incapaz de adaptarse a su propia sociedad. Algunos, sin embargo, han dejado a un lado su
inseguridad, su codicia y su egoísmo dando luz a una esperanza que se gestaba
en muchos de nosotros desde hace tiempo. Han surgido mentes libres y valientes
en busca de su propio camino.
Los que catalogan al 15M de modo parcial e insuficiente es
porque, por tendenciosidad, cobardía o ingenuidad se posicionan del lado de la fuerza bruta. No
es el PP quien nos gobierna. No hay oposición ni izquierda ni derecha ni partidos
políticos alternativos. Todos son mercenarios que obedecen a un poder superior que nos controla y esclaviza.
A todos aquellos que hacen de su deseo de dejar de vivir la
tragedia de la sumisión y el conformismo su filosofía de vida: ¡BRAVO!
Blanche
Blanche
Desde que surgió el 15M, allá por el 15 de mayo de 2011 (aunque hasta
meses después no se acuñó esta denominación), he visto miles de actitudes
despectivas hacia sus simpatizantes y/o integrantes. Algunas
tremendamente divertidas. Cosas como que gracias al 15M el PP tiene
mayoría absoluta o que una cúpula de ultraderecha dirigía el movimiento
«en la sombra» para desbancar definitivamente a la izquierda de este
país (yo me sigo preguntando qué izquierda había que desbancar). Y en el
otro extremo, los otros que diría Amenábar, estaban los que decían que
el 15M era un grupo de terroristas de la izquierda abertzale que
simpatizaba con ETA. Del 15M se ha criticado TODO: su ineficiencia, su
insuficiencia, su dispersión, su negativa a tener representación
parlamentaria, su querencia a abarcar todas las injusticias, incluso las
que no vemos aquí («es que protestan hasta por lo que pasa en Siria»),
su localismo ("es que se quedan en los problemas de su barrio"), se ha
puesto en duda hasta su higiene en Aquellos Maravillosos Años de
acampada. La incoherencia de los que no han asimilado ni de lejos el
espíritu del 15M, aunque de primeras lo consideraran una tabla de
salvación para su partido concreto y/o intereses particularísimos, es
ilimitada y además se expande. Como el universo y la estulticia. Parece
que es difícil de entender por una gran mayoría que en este país
construido en bloques (dos) pueda surgir y mantenerse a flote un
movimiento social apartidista, (que no apolítico) con pretensiones
mundanas muy claras. Un movimiento ciudadano cuyo espíritu no es
aprehensible dentro de este sistema de valores y con la cabeza cuadrada
de los que se afilian a ideas obsoletas, de izquierda, derecha o de
centro lateral. El 15M no estalló para apoyar a la izquierda (repito:
qué izquierda), ni para desbancarla, estalló como consecuencia de una
situación socioeconómica y moral INSOSTENIBLE, a la par que VERGONZOSA. Y
germinó y sigue creciendo en los márgenes como flor de asfalto. Y en
este momento, ahora, y a pesar de las falacias y las conspparanoias de
unos y otros, el 15M sigue (porque sigue la estafa) y se mantiene gracias al trabajo
tantas veces invisible, no reconocido e impagable de una minoría
indignada que no se cansa de repetir que somos ciudadanos de primera y que exigimos
una democracia real.
Por todo eso Perroflautas del mundo
también continúa como un espacio de resistencia con el espíritu del 15M
intacto.
Sue