sábado, 27 de marzo de 2021

Memorias que merecen historia. Vidas que merecen dignidad, de Francisco J. Leira Castiñeira

NUEVATRIBUNA.ES
 FRANCISCO J. LEIRA CASTIÑEIRA   26 DIC. 2020

Uno de los modos de prestar oídos a la historia es escuchar la voz del pasado a través de las personas que lo vivieron. Las mismas que padecieron lo peor de la crisis sanitaria, muchos en soledad, con sus familias deseando estar con ellos. Pero también lo peor de nuestro pasado, la parte más gris. Una generación que merece un homenaje público pues es historia de nuestro Estado. Para mi investigación, necesitaba de testimonio de personas que hubieran sufrido la guerra. Fui a una Residencia de la tercera edad y la responsable de las actividades que hacían, me proporcionó un listado de aquellos/as que querían participar.


Recuerdo la primera entrevista, bueno realmente me acuerdo de todas, que realicé a un soldado de la Guerra Civil, fue en una residencia de la tercera edad. Yo estaba nervioso, a pesar de que no era la primera vez que acometía una labor así. Era un caballero con las facciones propias de quien ha trabajado duro en el campo, hablaba en un gallego precioso, puro, de aldea. Al comenzar el relato de cuando lo llamaron para alistarse en el ejército sublevado, ese aire de rudeza cambió por completo. Ya no estaba hablando con un hombre de 92 años, sino con un joven de 20 a quien habían llamado a filas. Sus ojos se aniñaron y su mirada viró hacia el miedo. Más que recordar, revivía, se encontraba literalmente con el petate, frente al tren que lo iba a destinar a una unidad militar, y me transmitió sus sentimientos. De su boca salían las palabras, con un tono distinto, más dulce, genuino, el propio de los jóvenes cuando se enfrentan a una situación que les viene grande. Relató su historia con una voz entrecortada que helaba el corazón. Cuando terminé de hablar con él, me pensé sí, ¿Realmente tenía sentido hacerles vivir otra vez el miedo, la tristeza y la vergüenza?

El siguiente parecía más joven, pero tenía la misma edad. Estaba aprendiendo inglés y gozaba de un conocimiento de la actualidad y una capacidad de análisis que reconozco, por culpa de mis prejuicios, me sorprendieron. La conversación fue muy fluida. Me contó operaciones militares, cómo se atacaba, las posiciones, y todo con un folio y un bolígrafo para que yo no me perdiera ningún punto. Lo narraba con el entusiasmo de quien no había recibido atención y ahora contaba con un público a quien sorprender. Sin embargo, nunca hizo referencia a la muerte que pudo perpetrar. Este siempre fue un factor común: ninguno de los entrevistados de esta generación mencionó nunca si habían tenido que matar. Comprendí que era un mecanismo de defensa para evitar contar lo que creía que no iba a ser comprendido por alguien que no había estado en el frente: «Una guerra hay que vivirla» dijeron todos (...)

Francisco J. Leira Castiñeira, doctor en Historia por la Universidade de Santiago de Compostela y visiting fellow en la University College Dublin - Center War Studies, es autor de Soldados de Franco. Reclutamiento forzoso, experiencia de guerra y desmovilización militar, publicado recientemente en Siglo XXI de España.

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